LIPOLIFTING
El lipofilling es una técnica de cirugía estética que implica la extracción de grasa de una parte del cuerpo del paciente, para su posterior inyección en otra área. Esta técnica se puede aplicar en diversas regiones anatómicas, siendo los lipoinjertos más frecuentes aquellos realizados en el rostro. Su objetivo es mejorar el contorno y la volumetría de las zonas tratadas, contribuyendo así a la armonía estética del paciente.
La transferencia de grasa en los surcos nasogenianos, los pómulos y las líneas de marioneta se lleva a cabo con el objetivo de rejuvenecer el óvalo facial. A medida que transcurre el tiempo, la piel experimenta una pérdida de elasticidad y tersura, lo que da lugar a la aparición de arrugas. Existen diversas intervenciones quirúrgicas faciales que pueden mitigar estos efectos, sin embargo, el lipofilling se destaca como uno de los métodos más eficaces. Esta técnica no solo mejora la apariencia estética, sino que también promueve un resultado natural al utilizar el propio tejido adiposo del paciente.
Resumen
El lipofilling es una técnica de cirugía estética que implica la extracción de grasa de una parte del cuerpo del paciente, para su posterior inyección en otra área.
Puntos clave a entender en este procedimiento.
- No es invasivo.
-
El tipo de anestesia puede variar.Se puede realizar con anestesia local, local con sedación o, en algunos casos, anestesia general.
Preguntas Frecuentes
Si aun tienes dudas sobre este procedimiento puedes contactarnos y con gusto contestaremos tus dudas!
¿Cuáles son las ventajas de usar la propia grasa del paciente?
La lipotransferencia es una opción genial porque utiliza la grasa del propio paciente, lo que reduce casi por completo el riesgo de rechazo y alergias. Además, la grasa contiene células madre que ayudan a regenerar la piel, así que se garantiza obtener resultados duraderos. También al extraer la grasa de otra zona, se mejora el cuerpo.
¿Cómo se hace la cirugía?
El lipolifting se lleva a cabo mediante una serie de pasos. En primer lugar, se administra anestesia local o general al paciente, según sea necesario. Posteriormente, se procede a la extracción de la grasa de la zona del cuerpo que se desea reducir, utilizando cánulas especializadas que preservan la integridad de las células.
Una vez extraída la grasa, es fundamental someterla a un proceso de purificación antes de su inyección. Este procedimiento incluye la centrifugación de la grasa, en la cual las jeringas se colocan en una máquina que separa las células adiposas de la sangre y los triglicéridos. Es importante destacar que solo las células grasas purificadas son empleadas en el proceso de lipotransferencia.
¿Cómo es el proceso postquirúrgico?
Durante las primeras horas postoperatorias, es normal la hinchazón, hematomas y dolor en las áreas donante y receptora, que se tratan con analgésicos para mitigar estas molestias.
La hinchazón y los hematomas disminuirán gradualmente en la primera semana. Se permite retomar actividades cotidianas ligeras, siempre que se sienta cómodo y se sigan las recomendaciones médicas. En esta fase, es esencial mantener una adecuada higiene en las zonas tratadas y evitar la exposición solar.
A partir de la tercera semana, la mayoría de los pacientes pueden reanudar sus actividades normales, incluidos ejercicios físicos, siempre que cuenten con la autorización médica. La hinchazón residual se irá reduciendo progresivamente, y los resultados finales del lipo comenzarán a ser más evidentes.